Bicicletas, anillos de compromiso, ordenadores, la cubertería de plata… Cuando se contrata un seguro del hogar son muchos los que olvidan hacer un análisis adecuado de las joyas y otros objetos de valor especial, renunciando a que se restituya su coste convenientemente frente a un robo o un incendio. Un descuido que atañe de forma especial a los inquilinos, cuyas pertenencias no son cubiertas por el seguro que tenga contratado el propietario del inmueble.
Y el riesgo existe. Se cubrieron un total de 225.000 siniestros por robo en vivienda entre el 1 de agosto de 2020 y el 31 de julio de 2021, sobre unos datos totales de 15 millones de viviendas aseguradas por 28 compañías. Si atendemos al hecho de que los propietarios recibieron una indemnización media de 1.115 euros, apenas el precio de un ordenador portátil, la pregunta es hasta qué punto compensaron el valor real de las pertenencias que pasaron a los amigos de lo ajeno.
En torno al 75% de las familias tiene contratado un seguro del hogar en su vivienda, la duda es si estas pólizas se ajustan realmente a sus necesidades, especialmente en el caso de pérdida de esos objetos de valor especial pasto del fuego o del agua.
¿Cómo se puede estimar el valor de los objetos?
Normalmente, todas las aseguradoras proponen unos valores para las coberturas de continente y de contenido que están basadas en años de experiencia. No obstante, nosotros solemos proponer una fórmula sencilla a los asegurados que nos preguntan y que quieren tener la certeza de que la cobertura que contratan es suficiente.
En resumen, el método consta de cuatro pasos:
- Hacer fotos o un vídeo de todos los objetos de la vivienda.
- Realizar una lista con los más valiosos que se hayan identificado, y calcular su coste de modo individual.
- Para artículos menos valiosos, como ropa o utensilios de cocina, estimar una cifra conjunta.
- Sumar todo y redondear a los 10.000 euros más cercanos, para así calcular mejor el valor de la cobertura de contenido. Por ejemplo, si calculas que tienes cosas por valor de 17.000 euros, elige una cobertura de contenido de 20.000 euros.
¿Qué soluciones ofrece el seguro de hogar para los objetos de valor especial?
A la hora de asegurar los objetos de valor, las principales aseguradoras operan con uno de estos tres modelos.
- Seguros que preestablecen un valor unitario de la cantidad máxima que se cubre, la horquilla puede ser muy dispar, desde los 2.000 a los 6.000 euros.
- Seguros donde además de contar con una limitación de valor por objeto, se puede asegurar cualquier otro de valor superior declarándolo de forma individual.
- Seguros que no ofrecen la cobertura de determinados objetos de valor. Joyas y objetos electrónicos y móviles, “que por sus especiales características suelen presentar una mayor siniestralidad y los seguros ofrecen pólizas individuales; es el caso de una póliza complementaria”.
¿Qué cubre un seguro de hogar estándar?
Esta póliza tiene que proteger el continente, el contenido y el patrimonio de una persona, salvaguardando su responsabilidad civil.
Hay que fijarse en los valores del continente (la vivienda) y el contenido (los enseres). El objetivo es asegurar que el valor establecido cubriría la reposición en caso de siniestro. Pero García insiste en que “lo ideal es ni pagar de más, ni pagar de menos, sino lo justo”, y hace dos recomendaciones:
- Que el valor no debe estar por encima del real para no pagar un sobreprecio en el seguro.
- Qué el valor no sea significativamente inferior. Frente a una situación de infraseguro, la aseguradora puede aplicar la ley de proporcionalidad: Si considera que tú póliza sólo está cubriendo tres cuartos de tus pertenencias, únicamente pagará tres cuartos de lo que es el siniestro.
Lo más habitual es que el interesado tenga que elegir entre tres tipos de seguros:
- Modular. Ofrecen una cobertura básica muy ajustada, permitiendo sumar otras según las necesidades. Tiene el peligro de que no forzosamente todo el mundo es experto en seguros y sabe qué tipo de coberturas incluir. Por ello, el usuario tiende a cubrir poco más que la responsabilidad civil, lo que puede representar un claro problema en caso de siniestro.
- Cerrado. Se ofrece una póliza más estándar atendiendo a las necesidades más habituales.
- Extenso. Ofrecen una gran relación de coberturas, el consejo es que el cliente compruebe si le interesa incluir servicios como asistencia escolar o asistencia tecnológica.
¿Qué coberturas debe tener el seguro del hogar?
Lo más importante son los daños por agua, fuego (incluidas humo y explosiones), fenómenos atmosféricos, robo dentro de la vivienda y, potencialmente, fuera de la vivienda y vandalismo.
También es básica la cobertura de responsabilidad civil. Se activa cuando un siniestro en la vivienda del que eres responsable, por ejemplo un incendio, causa daños a terceros.
También son recomendables coberturas relacionadas con accidentes como la de cristales y vitrocerámica o la que protege los mármoles, granitos y la loza sanitaria.
Es igualmente interesante la de daños estéticos. Si no hay repuesto del mismo material tras un siniestro por agua que ha estropeado parte del solado, servirá para cambiar el de toda la estancia. Sobre este punto, García advierte que a la hora de comprobar este tipo de coberturas no solo hay que preocuparse de la cantidad que ofrecen en caso de siniestro, también de lo que cubre, atendiendo a las excepciones que el texto de la póliza precise.
Otra tendencia en el seguro del hogar es el de la “servicilización”. Permite la intervención de profesionales de mantenimiento, manitas o cerrajeros que acuden para arreglar pequeños desperfectos de la casa o actuaciones de bricolaje. Los daños por agua representan cuatro de cada diez de los desperfectos atendidos por estos profesionales. Le siguen en importancia, la rotura de cristales y los daños eléctricos.
Al margen de las señaladas, el cliente se puede encontrar que como opcionales u obligatorias, se incluyan otro tipo de coberturas en su seguro. Ejemplo son las accidentales, que van más allá de las cubiertas de modo estándar: seguros de hospitalización y accidentes, coberturas en viaje, coberturas relacionadas con las mascotas…
¿Qué pasa con las viviendas en alquiler?
El seguro de hogar de un casero únicamente cubrirá el continente, la responsabilidad civil de la vivienda, por ejemplo si explotan unas cañerías, y los objetos del casero. Cualquier cosa que sea del inquilino, no será cubierta por el seguro de hogar.
Es por ello que en Grup Solfinc recomendamos que el inquilino contrate una póliza de seguro de contenido y responsabilidad civil. Así se logrará cubrir la totalidad del inmueble, tanto por parte del inquilino como por el propietario.
¿Cómo procede la compañía en caso de siniestro por robo?
En la mayoría de los casos, la aseguradora pedirá la presentación de la denuncia. Lo más habitual es que si el asegurado ha detallado los objetos sustraídos en la denuncia policial, baste con presentar este documento, pero algunas compañías pueden exigir algún otro adicional. Finalmente, la aseguradora indemnizará con el valor de los objetos.
Para establecer la cuantía a entregar, las dos prácticas más extendidas son: el valor real y el valor de reposición a nuevo:
- Valor de reposición a nuevo (también, valor a nuevo o valor de nuevo). El valor del bien asegurado es el equivalente al coste de comprar el mismo bien nuevo u otro de iguales características en el momento del siniestro. Este matiz es importante porque se refiere al valor que en el momento del siniestro tiene el objeto, teniendo en cuenta que artículos, como los tecnológicos, se deprecian en poco tiempo. En algunos casos, para esos objetos que están ya muy depreciados puede existir una cláusula correctora. La más habitual es la que dice que el valor de reposición a nuevo es equivalente al menor de estos dos valores: el valor de comprar el bien nuevo o el valor real (aplicando depreciación por uso) incrementado en un 50%.
- Valor real (o valor de uso). La cantidad se calcula según el valor del bien u objeto como si fuera nuevo, pero restando la depreciación que haya tenido ya sea por el uso, el deterioro o por el paso del tiempo. Se suele calcular según el mercado de segunda mano (valor venal) o con tablas de depreciación que se establecen en la póliza (por ejemplo, 10% anual) y la vida útil del bien.
¿Qué ocurre si el asegurado no está conforme con la indemnización?
En caso de pasar los primeros 40 días y no llegar a acuerdo, se abre un plazo de ocho días en el que las partes designan a un perito para la evaluación. Si una de las partes pasado dicho plazo no designa perito, queda vinculada al informe pericial de la otra parte.
¿Qué seguro de hogar debo contratar?
Esto variará dependiendo del tipo de seguro que necesites (contenido, continente, responsabilidad civil, etc) y de las coberturas necesarias. Como es lógico, el seguro ideal es aquel que tenga una mayor cobertura a un precio menor. Esto dependerá mucho de la compañía contratada. Así mismo, disponer de un buen gestor o administrador de patrimonio puede ser vital a la hora de conseguir del seguro de hogar perfecto para su piso, ya que puede conseguir buenos descuentos.
Si estás pensando en cambiar de seguro de hogar, no dudes en contactar con nosotros mediante los formularios de la web y te ofreceremos una propuesta que se adapte a tus necesidades.
Por otro lado, sigue nuestro contenido en el Blog, Facebook, Instagram o Twitter para mayor contenido del sector.